Cicloturismo

Dar una definición exacta del cicloturismo es complicada, es la actividad ciclista recreacional, es decir, no competitiva. No importan los kilómetros que se hacen ni en que tiempo, sino que se practica sin prisa, disfrutando de cada pedalada, de la compañía, del entorno que nos rodea, por dónde pasamos. Se trata de un deporte que además de darte una buena condición física, te permite hacer turismo, conocer innumerables localidades, parajes, montañas, degustar la gastronomía típica… algo de lo que estamos muy agradecidos de poder hacer en nuestra provincia, Huesca y la magia de su territorio.

Para nosotros, además de un deporte, es un cierto estilo de vida, una cierta concepción y una filosofía de vida. Una combinación indivisible entre hombre y bicicleta. Es un sinónimo de libertad e independencia que nos ayuda a redescubrir sensaciones perdidas en nuestro mundo interior, a reencontrar los placeres más intensos y a conectarnos e interpretar nuestro entorno y realidad de vida. Una fuente inagotable de sensaciones variadas para todas las edades y que, además, es también una herramienta de unión familiar, pues nos permite practicarlo también con los seres queridos. Además de ayudarnos a tener una larga y saludable vida, nos enseña valores como el esfuerzo, la educación, el respeto, el agradecimiento, el compañerismo y la solidaridad, idóneos para cualquier ámbito de nuestras vidas. Estamos de acuerdo con la afirmación “practicar cicloturismo puede ser el vehículo ideal para promover un cambio social” puesto que puede ser el primer paso hacia el uso diario y cotidiano de la bicicleta como elemento de movilidad personal en la ciudad, lo cual supone un gran beneficio para el ecosistema. En ese mismo aspecto, también hacemos énfasis en frenar el número de desperdicios que se ven por las carreteras, promoviendo entre nuestros socios el hábito de guardar en los bolsillos los envoltorios y/o desperdicios de nuestros avituallamientos  mientras pedaleamos para posteriormente ser reciclados finalizada nuestra salida cicloturista.

Cuando salimos a pedalear, tenemos decenas de ocasiones para ser solidarios con nuestros compañeros de ruta o incluso otros ciclistas que encontremos en el camino y puedan necesitar nuestra ayuda: un grito de ánimo, una cámara para reparar un pinchazo, ofrecer rueda para superar un tramo contra el viento o simplemente unos kilómetros de compañía y charla. Detalles que nos hacen grandes cicloturistas y personas y que nos dan nuevas amistades.

Por cuestiones como éstas, el cicloturismo es un deporte tan especial.